Fué rescatada el día 1 de Diciembre.
El destino o la casualidad, nos puso frente a frente.
Ella aterrorizada, los coches rozándole su cuerpecito que temblaba. Mendigando comida y cariño.
Yo angustiada, tratando de salvarla y saltándome las normas de tráfico a la torera.
Detrás camiones y más coches: la muerte segura.
Paré como pude y con una barra de pan la atraje hacia mí. Cuando el pan se acababa pensé: es el fin.
Metí en el coche lo que quedaba de la barra y ella, sea por hambre, sea porque confió en mí, se subió solita al coche de un salto. Se hizo un ovillito en el asiento y me la llevé al veterinario.
Estaba llena de heridas por todo su cuerpecito, heridas de mordiscos de otros perros, según el veterinario. Pero su estado de delgadez y su miedo nos indica que ha vivido en un horror, aunque ya ha dado un gran cambio desde que está conmigo.
No tiene Leishmania, ha dado negativo. La he vacunado, desparasitado, bañado, chipeado y ya está castrada.
Es jovencita, 2 añitos, pero juega como un cachorrillo, nunca supo lo que era jugar con un juguete y ahora da gusto verla jugar.
La tengo en el recibidor porque de mi casa porque no hay otro hueco para ella. A ratos atada, a ratos suelta. Pero la pobrecita se adapta a todo.
Es una galguita pequeña, menuda, a la que han pegado muchas palizas.
Está lista para ser adoptada. Busco para este pequeño y precioso ángel la mejor de las familias. Personas responsables que sepan lo que quieren, con ideas muy claras, que la quieran y la hagan tan feliz como ella hará a la familia que tenga la suerte de adoptarla porque es un amor de buena.
Hay que rellenar cuestionario, firmar contrato de adopción y permitir visita a su hogar para conocerlos. Se hará seguimiento.

Contacto: Gracia 667 342 300 o Gracia@animalhelp.es / EN FACEBOOK