Y
unas cuantas reflexiones para las que andamos en este mundo del
rescate y la adopción:
Cada
persona emplea su tiempo libre como estima oportuno, hay para todos los gustos, o ayudando a
la causa que más le preocupa y que merece su atención.
La mía son los animales porque a diferencia del humano, no
tienen voz para quejarse de las injusticias, ni derechos que hacer
prevalecer, no cuentan con Leyes que los protejan y son seres indefensos
expuestos, casi siempre, a la maldad del hombre, cualquier muestra
de cariño, por pequeña que sea, la reciben con gran
alborozo y es el compañero más fiel que se pueda desear.
A mí personalmente me cabe la satisfacción de participar
y contribuir en algo que me parece de justicia: ayudar a un animal
maltratado, abandonado o enfermo a recobrar la dignidad perdida encontrándole un
buen hogar, una buena familia, para el resto de su vida. No he encontrado nunca mejor
recompensa a mi labor que sus miradas llenas de agradecimiento. Pero eso sí, siempre se acaba con LA CASA LLENA DE ANIMALES Y............... LA CARTERA VACÍA.
Es muy importante seguir la evolución tras su adopción, durante un tiempo prudencial, como debería
hacerse en todos los casos. Con ello se evitaría quizá para ese
animal un nuevo abandono, malos tratos, ir a parar
a la perrera, como sucede la mayoría de las veces que no
se tiene control sobre ellos. Los "maravillosos adoptantes"
pueden cambiar de actitud, se pueden cansar del animal, con el seguimiento se puede impedir que esto suceda. Las perreras
están a tope y las protectoras saturadas de estos casos.
Hay que extremar las precauciones a
la hora de la adopción. Por tanto siempre:
CUESTIONARIO PREVIO A LA ADOPCIÓN preferiblemente firmado
por el adoptante y con fecha. Recibo de luz o de teléfono
a su nombre. Fotocopia del D.N.I. Si está caducado, no entregar
al animal, puede tratarse de una falsificación. Y por supuesto CONTRATO DE ADOPCIÓN. Cuidado con las cláusulas, que luego
no hay forma de que las cumplan. Es aconsejable entregar al animal con el chip puesto a vuestro
nombre, haciendo constar en el contrato que sólo se llevará
a cabo el cambio de titularidad en el mismo, al cabo de 3 meses aproximadamente,
no antes, tiempo más
que suficiente para saber lo que esas personas pueden dar de sí con el animal. Y hacer constar que el cambio se llevará a cabo con una autorización tuya firmada. A pesar de la buena impresión que nos llevemos de ellos,
puede que solo hayan puesto buena cara en la visita. Desconfiar de las prisas por adoptar a un animal, son adopciones compulsivas que se desinflan como un globo pinchado.......... Las cosas con calma y bien hechas, si de verdad lo quieren, que esperen. Si no quieren esperar y deciden adoptar a otro animal, ya saldrá otro adoptante, ese no era de fiar.
La
gente está más informada cada día, por medio
de Internet de todo lo concerniente a los animales, tanto para bien,
como para mal. Les sobra el tiempo para estudiar la forma de engañar
sabiendo de antemano lo que vamos a pedir para ellos.
No obstante, no podemos ir por el mundo desconfiando de la gente,
hay que seguir confiando en que haya personas buenas, con nobles sentimientos
hacia estos seres tan desgraciados, sin embargo y para nuestra desdicha,
no poseemos el poder de la adivinación. No se puede saber
cuándo una persona miente o cuándo es sincera. No, por desgracia no tenemos ese don, sobre todo si topamos con personas
habituadas a mentir para conseguir lo que quieren: se las saben todas.
Y por otra parte, tampoco podemos contratar los servicios de un detective para cada
persona que nos quiera adoptar un animal a fin de que investigue
su vida y milagros antes de firmar el contrato. Así que solo
nos queda extremar las precauciones, y cuanta más documentación
y más datos pidamos, mejor.
La
primera visita se debería realizar a la semana o 10 días,
dando tiempo al animal para acostumbrarse a su nuevo hogar y los
dueños a él. Eso sí, llamarle el mismo día
que se lo lleven, para saber cómo ha sido la entrada en su
casa y luego cada 3-4 días, sobre todo si se prevee cualquier
reacción negativa por parte del animal, no sea que vaya a
haber problemas de comportamiento, mordeduras, destrozos, etc. etc..
Es menos importante ponerse un poco pesado, con educación, que dejar transcurrir
muchos días sin saber si hay incidencias que luego no puedan
tener arreglo, (que se cambie de domicilio y no puedas localizarlo,
que pese al contrato firmado se lo haya dado a algún amigo
o familiar porque no le gusta, lo haya llevado a la perrera porque
no cumplía sus expectativas, lo haya dejado en medio del
campo abandonado y luego alegue que se le escapó, lo tenga
en una finca o chalet en el que no viven porque no les gusta tenerlo
en casa y donde solo van cuando se acuerdan que tienen un animal
que quizá tenga hambre, o que te hayan mentido y la vivienda
sea de alquiler y el casero no permita tener animales en ella, o
que los vayan a echar por falta de pago, etc. etc.), estas situaciones
han sucedido cientos de veces y hay que estar con cien ojos para
evitarlas.
Si
en el tiempo que ha estado contigo al animal lo has vacunado, desparasitado
o castrado, estos gastos deberías cobrárselos al adoptante,
porque se ha evitado tener que hacerlo él y le entregas un
animal sano y en condiciones óptimas que a tí te ha
costado un buen dinero. Es importante no regalar a un animal sin
cobrar estos gastos, un animal que no "cuesta" nada, quizá
a los ojos del adoptante no tenga tanto valor que uno por el que
ha tenido que invertir dinero.
Eso sí, sin tratar de lucrarse
a costa del animal, de forma honrada. Si el adoptante es buena persona
y amante de los animales y quiere a ese animal, no pondrá
ninguna pega, siendo como es razonable y justo. Si empieza por poner
pegas a la cuestión económica o a los seguimientos
es que no merece la pena como adoptante, creedme. Una persona que
no está dispuesta a gastarse dinero en un animal, no es de
fiar, lo mismo lo quiere para mantenerlo a base de mendrugos de pan,
de sobras, sin controles veterinarios y en unas condiciones pésimas,
sólo para que le sirva para sus fines (para criar, de guardián,
de capricho para los niños, etc.etc.), para eso, mejor no darlo y esperar
a que salga alguien verdaderamente bueno. Yo he cometido el error,
muchas veces, de no cobrar nada porque me interesaba mucho más
el haberle encontrado una buena familia que el pago de los gastos ocasionados,
y he hecho muy mal. Efectivamente no se valora al animal como se
debe.
Y
sobre todo, ¡¡¡ ojo con los cachorros !!!. Si
recibes llamadas preguntando por ellos porque has puesto un anuncio
sea en prensa o en Internet, no des demasiados datos, en cambio
tú pide todos los que puedas, que sepan que no van a poder
llevárselos tan fácilmente, que no se regalan porque
sí..., sin más. Hay muchas personas indeseables que los
quieren para comerciar con ellos, venderlos, etc. y cuando se encuentran
con que tienen que dar los datos de su D.N.I. y demás, permitir
seguimientos, pagar dinero por ellos, etc. , se echan para atrás
o intentan liarte con embustes y datos falsos. Mejor para tí
cortar por lo sano, es mala gente, mejor no tener trato con ellos.
Si
se trata de animales adultos, corpulentos, ojo con los que se dedican
a peleas de perros, los quieren como sparrings para entrenar a sus
perros. Vamos que los matan entrenando, así de duro y de
fuerte, pero cierto. Si son grandes, como mastines, pastor alemán,
etc. te saldrán adoptantes para tenerlos de guardianes en
una finca, naves, terrenos con huerto. Quizá no vayan por ella en semanas, y los tengan
atados a cadenas a la intemperie, sin apenas alimento ni agua, mejor
muertos que en esas condiciones.
Ante
cualquier sospecha de las anteriormente citadas, no dudeis en denunciar.
Esta gente que engaña y estafa para obtener un animal gratuitamente,
sin consideración hacia la persona que lo ha salvado y lo
ha cuidado durante meses, que se ha gastado en él un dinero
importante, que le tiene un gran cariño, no merece ningún respeto, es gente de la peor
clase. Ya saben lo que hacen, no recogen ningún animal abandonado,
aunque lo vean muy mal, porque saben que tienen que empezar a gastar
dinero en curarlo, se van directamente a los anuncios en Internet
y cuando ven a un perro bien cuidado, con todas sus vacunas puestas,
sano y lustroso, entonces llaman, pero luego no cumplen nada de
lo prometido, son personas sin escrúpulos, mejor cortar por lo sano. |