Algunos han fallecido... pero antes fueron felices con sus familias
Perritos de una protectora a los que ayudamos durante muchos años, cuyas imágenes he podido rescatar y escanear..
Año 2000 aprox. -ALCORCÓN: * PASTY * muy enfermita de Leishmania y abandonada en el Pantano de San Juan

Queridísima, adorable Pasty, te nos fuistes al cielo de los perros.
Mientras viva recordaré el primer día que te ví porque quedé muy impresionada.
Eras la viva imagen de la enfermedad de la Leishmania. Apenas quedaba pelo en tu cuerpo y el escaso que tímidamente se mantenía, se iba cayendo a tu paso. Eras un saco de huesos, sucio y maloliente, llena de heridas infectadas: UN HORROR.
De momento quedé paralizada, fueron sólo unos segundos, los que tardé en mirarte a los ojos: Era tan grande tu súplica que dejé a un lado los escrúpulos y me acerqué a tí. Recibistes mis caricias como el mejor de los manjares, saboreándolas ¡¡¡ tanto hacía que nadie te demostraba un poco de cariño !!!. La bondad que reflejaba tu mirada, hizo que mis temores se disiparan, te abracé y consolé lo mejor que pude y apartir de ese momento, me encargué de tu cuidado personalmente.
¡¡¡ Lo que luchamos juntas, Pasty...!!!, pero pasados varios meses, los resultados estaban a la vista: Eras una perra preciosa, buenísima y adorable.
Te encontraron abandonada en el Pantano de San Juan con un aspecto terrible. Tus supuestos amos te abandonaron al saber de tu enfermedad y tú no sabías hacia donde tirar de lo asustada que estabas. Algún alma buena se compadeció de tí y te llevó a la protectora, donde fuiste ejemplo de convivencia y buen carácter.
Te juré que encontraría una familia para tí, alguien que te mereciera y ¡¡ lo conseguimos !!. Te amaron muchísimo, pero la felicidad por fin hallada, sólo te duró 1 año.
Otra grave enfermedad acabó con tu vida. El tiempo que pasaste con nosotras hizo que recobraras la fe perdida en el ser humano. No hay día que pase en que no te recuerde como lo que fuiste: una gran perra llena de amor y ternura.
Pasty, allá donde te encuentres, quiero decirte que sigo queriéndote y que algún día tengo la esperanza de volver a verte allá, en la frontera que cruzaste sin mí. Te quiero amor.

Año 2000 aprox. ALCORCÓN: * REX * su ama lo llevó a la protectora y no quiso saber de él nunca más. Un ser adorable...

Mi grandote precioso.
Cuando eras pequeñito, te quisieron mucho, te criaron mimado y consentido porque eras un cachorro guapísimo, pero la veleidad de las mismas personas que te amaron, hizo que te abandonaran en la protectora porque iban a venir niños a la casa. El encanto quedó roto, ahora estorbabas.
Pasaste más de dos años entre rejas, como un asesino que ha cometido el peor de los crímenes. De nada valieron tus protestas, tu angustia, tu miedo: estabas condenado.
Eso agrió tu caracter dulce y noble... Te peleabas con todos tus compañeros y con todo el que se ponía a tu calcance porque estabas defraudado del mundo. Más de una vez evité que un palo se "escapara" hacia tu cabeza. Más de una vez te saqué de peleas a muerte con tus compañeros. Te protegí todo lo que pude, por eso me entregaste tu amistad sin límites. Fuimos grandes amigos Rex. Y cómplices. Te llevaba latitas a escondidas, igual que a los demás, a los que podía. Te demostré que a mí sí me importabas y mucho. Te curaba tus oidos y las heridas de los mordiscos que te hacían en tus peleas.
Y más tarde te conseguí un hogar, aquel que te merecías Rex, y luché mucho por ello, amigo. Pero tus ansias de libertad reprimidas, te llevaron a escaparte en un descuido de tu nuevo hogar. Por mucho que te hemos buscado, durante años, empleando todos los medios a nuestro alcance, nunca más hemos vuelto a saber de tí.

Creo, intuyo, adivino, tu triste final. En pleno monte de cazadores, donde podías espantar a sus presas.....
Sólo pido a Dios que fuera rápido y no sufrieras nada. Aún hoy, después de dos años, cada vez que paso por la zona donde perdimos tu rastro, no puedo remediar angustiada y entristecida el llamarte a voces: ¡REX!, ¡REX!, ¡REX!, pero ya no acudes a mi llamada como cuando me esperabas tras las rejas de tu prisión, en cuanto oías a lo lejos el motor de mi coche, a la vez feliz, contento y ansioso por encontrarte conmigo, disputándote con tus compañeros el ser el primero en recibir mis caricias. Rex, tu paso por este mundo no fue dichoso, pero quiero que sepas, allá donde te encuentres, que te quise muchísimo, que te comprendí y que siempre estarás en mi corazón, cariño....

Año 2000 aprox. ALCORCÓN: * GALLO * ¡¡¡ pobre perro tan salvajemente maltratado a manos de seres sin escrúpulos !!!!... utilizado para peleas..
 

Gallo ha sido el perro con peor suerte en la vida que he conocido jamás. Debió ser un Pitbull precioso, pero gente sin escrúpulos lo metieron en peleas. No debió ser lo suficientemente agresivo porque le machacaron a fondo. Lo dejaron a las puertas de la protectora donde yo iba todos los días, como si fuera un despojo, lleno de sangre, ni se le veía la cara. El encargado entonces, y unos cuantos voluntarios, lo metimos en un chenil hasta que lo viera el veterinario. Cuando empezó a curarse, le faltaba medio ojo y el otro lo tenía dañado, no tenía orejas y estaba lleno de grandes boquetes por todo el cuerpo. Era una piltrafa.
Pero Gallo se aferró a la vida y consiguió vivir, aunque ¡a qué precio!. Su vida apartir de ese momento se ciñó a unos pocos metros cuadrados de tierra, una caseta por donde se colaba el agua a borbotones, el viento, el frío y la soledad. Nadie quería entrar a su patio porque decían que mordía. Le echaban la comida y el agua por debajo de la puerta metálica, cayera como cayera, la mayoría de las veces en el suelo....

Con el pánico que tengo a los perros agresivos, solo ver tu estado, un día me armé de valor para entrar en su patio. Pudo más la pena y la lástima que sentía por él, que el miedo. Me olisqueó a gusto y decidió que yo no era "peligrosa". Apartir de ahí, fuimos grandes amigos. Después de mis tareas como voluntaria, todos los días, le ofrecía un poco de mi tiempo, comida y caricias. Me sentaba al lado de su caseta, le cogía su cara deforme entre mis manos, le acariciaba y lo besaba. Él apoyaba su maltecho cuerpo en mi regazo y dormitaba feliz. Le curé sus ojitos que se le llegaron a poner muy bien. Le limpiaba sus cacharros y su caseta. Le llevé mantas y cartones; le hice la vida un poco más grata durante muchos meses. Y él supo agradecérmelo con creces porque se dejó hacer de todo por mí, mientras seguía sin admitir a nadie más en su cubículo. En esos momentos que le dedicaba, le hablaba constantemente. Le decía palabras llenas de amor y compasión. ¡Qué injusta fué la vida contigo Gallo!... y él con su medio ojillo, me miraba con adoración, como si entendiera mis palabras. Tuve que dejar la protectora pasado algún tiempo y me despedí de todos los grandes amigos perrunos que en ella había hecho, podría citar nombres y no acabar, pero si me fuí llorando fué por mi pobre amigo Gallo, al que dejaba huérfano. Más tarde me consolé porque entró una persona maravillosa que trataba a todos los perros con mucho mimo y pensé: Gallo está en buenas manos.

Jamás te fuiste de mi mente querido amigo, cuando tuve que cambiarme de casa, buscaba una donde pudiera tenerte, una que tuviera un rinconcito tranquilo y bonito para que tú pasaras el resto de tu vida allí, conmigo, aunque fuera un poco aislado debido a tu caracter forjado por la mala vida que te dieron, mi amor. Pero estarías a mi lado y yo te cuidaría ya para siempre. No pudo ser, las cosas se me complicaron y no tuve donde ponerte, aunque seguía con mi proyecto de "fabricarte un lugar para tí". Demasiado tarde, hoy me han dicho que te has ido.... No pude darte mi último abrazo amigo, pero sí puedo hacer que la gente sepa de tu existencia, de la mala vida que te dieron, de lo mal que te trataron y de que sí tuviste una persona que te quiso con todo su corazón, aunque no pude estar allí para darte mi último abrazo... tu amiga en el corazón, por siempre.............. GRACIA

Año 2000 aprox. ALCORCÓN: * PRINCESA * Dejada por sus amos en la protectora, sólo hacía que llorar y llorar mirando hacia la puerta por donde se fueron...

Princesa, así te llamamos cuando te dejaron en la protectora. No cumplías las espectativas de belleza que esos que se llamaron por unos meses tus amos, buscaban. En cambio tú, no dejabas de llorar, arrimadita a la puerta de la jaula, sin consuelo, mirando constantemente la puerta por donde se fueron esa gente sin corazón que no lo tuvo a la hora de dejarte allí, para toda la vida quizá.
Te consolamos lo mejor que pudimos, te dimos chucherías, pero te negabas a comer, solo querías que "ellos" volvieran, ir a tu casa, nada de lo que te decíamos te distraía de tu "guardia" en la puerta y a nosotras se nos partía el corazón ante tu imagen tan desvalida y triste.

Pasaron unos días y empezabas a entender cuál era tu verdadera situación. Ya te mostrabas un poquito más receptiva y alegre sin que la tristeza abandonara tu mirada. Pusimos todo nuestro empeño en encontrar un hogar, una familia de verdad, que nunca más te volvieran a abandonar, costó mucho, pero ¡¡¡ lo conseguimos !!! y el día que te fuiste con ellos, entonces las que lloramos, pero de alegría, fuimos nosotras. Ojalá que hayas sido muy feliz, querida Princesa, yo siempre te llevaré en mi corazón... GRACIA

Año 2003 aprox. ALCORCÓN: * FUJI * Abandonado en el campo. Años en la protectora, sin esperanzas de encontrar un hogar...

Estas fotos me las envió Irene, una gran, gran amiga. Los adoptantes que por fin logré encontrar para Fuji, al no tener donde localizarme, la escribieron a ella.

No recuerdo muy bien su historia. Sí recuerdo que era un grandullón adorable y buenazo que ya tenía asumido que la protectora era su hogar y los voluntarios, su familia. No se quejaba nunca de nada y todo le sentaba bien.

Me propuse que saliera ya de allí porque llevaba años y lo conseguí. Gracias a sus adoptantes por cuidarlo y quererlo como lo están haciendo. Estas imágenes tienen fecha de 2007, espero que aún siga vivo y disfrutando de su hogar, aunque será un abuelito adorable. Me alegro por tí, amigo ... GRACIA

Año 2001 aprox. ALCORCÓN: * RITA * Abandonada y enfermita, sólo era una cachorrita preciosa que quería amor...

Esta cachorrita ingresó en los chelines de Proa porque la encontraron por las calles. La pobrecina estaba muy, muy triste y apenas comía, sólo hacía que llorar y llorar. Me partía el corazón. Enseguida me puse a buscar adoptantes para ella y una chica de Móstoles respondió a mi llamada. No estuvo mucho tiempo en Proa, pero se hizo querer mucho porque era maravillosa.

Se la llevó adoptada, pero lo que no sabíamos es que ya iba enfermita, muy enfermita. La debieron abandonar por eso, pero como allí no había veterinario y se la veía bien, salvo su tristeza, nunca pudimos imaginar que estaba tan grave. La adoptante se portó genial con ella, la llevó al veterinario y la trató de su enfermedad con ahínco, pero la perrita no pudo superarlo, estaba muy grave.

Querida Rita, como yo te llamaba, lo siento tanto, preciosa. Menos mal que conociste el amor, el verdadero amor y tu ama lloró mucho por tí. Siempre estarás en nuestros corazones.

GRACIA